¿Estás buscando una forma única y atractiva de reunir a las personas para una noche de conversación estimulante y comida deliciosa? ¡Entonces no busques más allá de una Cena Jeffersoniana!
Nombradas en honor al tercer presidente de los Estados Unidos, Thomas Jefferson, estas cenas son un giro moderno en una tradición que se remonta al siglo XVIII. El propio Jefferson era conocido por su amor por la buena comida, el vino y la conversación, y sus famosas cenas eran famosas por su estimulación intelectual y animada discusión.
¿Cuál es el formato de una cena Jeffersoniana?
El formato moderno de una cena Jeffersoniana busca recrear esta misma atmósfera de conversación animada y reflexiva. Por lo general, una cena Jeffersoniana involucra a un pequeño grupo de personas – usualmente no más de doce – que se reúnen para compartir una comida para participar en una discusión profunda y significativa.
La clave para una cena Jeffersoniana exitosa es una planificación cuidadosa. El anfitrión o anfitriona selecciona cuidadosamente la lista de invitados, asegurándose de reunir a un grupo diverso de personas con una amplia gama de perspectivas y experiencias. La comida en sí también es una parte importante de la experiencia, ya que el anfitrión o la anfitriona seleccionan cuidadosamente un menú que es a la vez delicioso y estimulante.
Durante la cena, la conversación se guía por un conjunto de temas de discusión predeterminados. Estos pueden ser amplios y abiertos, o pueden ser más específicos y dirigidos. El objetivo es crear un entorno en el que todos se sientan cómodos compartiendo sus pensamientos e ideas, y donde pueda tener lugar una discusión animada y respetuosa.
Para asegurarse de que todos tengan la oportunidad de contribuir y que nadie se quede fuera, hay una regla importante que todos deben seguir: no hay conversaciones paralelas en la mesa.
En otras palabras, cuando alguien está hablando, se espera que todos los demás le presten toda su atención. Solo una persona habla a la vez, y todos los demás escuchan con atención. Esto no solo asegura que todos tengan la oportunidad de compartir sus pensamientos e ideas, sino que también ayuda a crear una atmósfera respetuosa e inclusiva donde todos se sienten valorados y escuchados.
Al eliminar las distracciones y concentrarse en el orador, los participantes de una Cena Jeffersoniana pueden entablar conversaciones más profundas y significativas. Es una regla pequeña pero importante que hace una gran diferencia en la calidad de la discusión y la experiencia general.
¿Por qué deberías asistir a una Cena Jeffersoniana?
Entonces, ¿por qué deberías considerar organizar o asistir a una Cena Jeffersoniana?
Bueno, por un lado, es una excelente manera de conectar con otros y entablar una conversación significativa.
En nuestro mundo cada vez más digital, donde tanta comunicación tiene lugar a través de pantallas, hay algo especial en reunirse en persona para compartir una comida y hablar cara a cara.
Además, una cena Jeffersoniana puede ser una manera maravillosa de ampliar tus horizontes y desafiar tus propias suposiciones. Al entablar una conversación con personas que provienen de diferentes orígenes y tienen diferentes perspectivas, es posible que veas el mundo de una manera completamente nueva.
En conclusión, si estás buscando una manera de salir de tu rutina habitual y entablar una conversación verdaderamente estimulante, considera asistir a una Cena Jeffersoniana. Con buena comida, buena compañía y conversaciones profundas, ¡es una experiencia que no olvidarás pronto! 
Tu invitación para unirtenos
Y, si te encuentras en Austin, Texas, y quieres ser parte de una de las Cenas Jeffersonianas que estoy organizando, llena este Formulario de Aplicación y te extenderé una invitación privada para que te unas a nosotros en la mesa .
Keep Learning. Keep Optimizing.
JJ
